Este film dirigido por Brad Peyton, a quien ya vimos en "San Andres" (2015) recrea las crónicas del Dr. Seth Ember (Aaron Eckhart) quien realiza exorcismos de forma un tanto controversial. La trama se reduce a la búsqueda de una entidad demoníaca llamada "Maggie", que vá saltando de sujeto a sujeto poseyéndolos de brutal manera. Este doctor utiliza técnicas de control mental y físico para adentrarse en la mente de los poseídos para así poder expulsar al demonio. Sus métodos poco ortodoxos llaman constantemente la atención del Vaticano, que decide interferir (enterados de sus obsesión con el demonio Maggie), y le proponen una nueva misión.
Esta pieza cinematográfica no conlleva gran cantidad de sustos sino simplemente una constante sensación de nerviosismo, además los efectos especiales se ven espléndidos en la pantalla. Es notable la actuación de David Mazouz (a quien tenemos la dicha de ver en "Gotham" encarnando a Bruce Wayne). Su desempeño en la película es cautivador, desde la posesión del demonio en su cuerpo hasta sus gestos, realmente es un personaje que la da un toque especial a esta cinta.
Por otra parte el Dr. Ember en su papel principal de esta pieza quedó desdibujado por el pequeño Cameron, sin embargo me agrada la forma en que se desenvuelve en torno a los exorcismos. Ademas, cuenta con un equipo de colaboradores que lo asisten en cada ritual de expulsión, dándole soporte médico para cuando sea requerido.
Si bien la trama se centra en la búsqueda del demonio Maggie, se explica muy levemente la historia de lo que denominan "Los Reencarnados" (sujetos con habilidades y poderes que les permite realizar esta tarea), sin mencionar que en la cinta aparece su predecesor, y tampoco explican que sucedió con el.
Me gusta el final inesperado en el que parece que la ilusión mental termina y vuelve a comenzar, sin embargo esta pieza no queda exenta de las historias ya conocidas de familias disfuncionales y estereotipos de personajes signados por tragedias.
Sin duda, un film para no dejar de ver, si lo que se quiere es disfrutar de una historia religiosa-demoníaca marcada por buenos efectos especiales y una excelente banda sonora.
Esta pieza cinematográfica no conlleva gran cantidad de sustos sino simplemente una constante sensación de nerviosismo, además los efectos especiales se ven espléndidos en la pantalla. Es notable la actuación de David Mazouz (a quien tenemos la dicha de ver en "Gotham" encarnando a Bruce Wayne). Su desempeño en la película es cautivador, desde la posesión del demonio en su cuerpo hasta sus gestos, realmente es un personaje que la da un toque especial a esta cinta.
Por otra parte el Dr. Ember en su papel principal de esta pieza quedó desdibujado por el pequeño Cameron, sin embargo me agrada la forma en que se desenvuelve en torno a los exorcismos. Ademas, cuenta con un equipo de colaboradores que lo asisten en cada ritual de expulsión, dándole soporte médico para cuando sea requerido.
Si bien la trama se centra en la búsqueda del demonio Maggie, se explica muy levemente la historia de lo que denominan "Los Reencarnados" (sujetos con habilidades y poderes que les permite realizar esta tarea), sin mencionar que en la cinta aparece su predecesor, y tampoco explican que sucedió con el.
Me gusta el final inesperado en el que parece que la ilusión mental termina y vuelve a comenzar, sin embargo esta pieza no queda exenta de las historias ya conocidas de familias disfuncionales y estereotipos de personajes signados por tragedias.
Sin duda, un film para no dejar de ver, si lo que se quiere es disfrutar de una historia religiosa-demoníaca marcada por buenos efectos especiales y una excelente banda sonora.
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