Kaiser

Se oye en las profundidades del inframundo los pasos del embajador del miedo. Paralizante y febril, hasta el suspenso del viento. Los habitantes de la tierra temen a mis palmadas, pues la cuenta regresiva para el comienzo de la oscuridad es inminente. Yo soy el Kaiser del Infierno, y he venido para darte la bienvenida. Te demostrare que de nada sirve escapar a los miedos, y te enseñare a enfrentarlos. Mostrándote la puerta del futuro, tu decidirás si obras para bien, en tus manos esta el poder de cambiar. 

No hay salida, es tiempo de pelear contra los espectros del pasado. Final del camino y el tiempo parece disiparse, has de pisar con fortaleza en las prisiones de este mundo y rescatar las emociones mas perseverantes. No será fácil enfrentarme, daré batalla para no dejarte volver a la Tierra. Si pierdo me retirare, pero si gano, el manto negro cubrirá toda la Tierra. El duelo esta próximo, sera mejor que no titubees ni bajes la guardia. 

Creo que has subestimado mi poder, pues me levantare tantas veces como sea necesario... Y tu espíritu de pelea habrá de derribarme igual numero de veces. Las tinieblas cubrirán hasta las flores y los arboles y el frió no dejara rincón sin habitar. Si tu deseo es devolver la esperanza a este mundo devastado por mi poder, deberás derrotarme con tu mas fuerte golpe. De lo contrario, el amor y la luz quedaran bajo mi mando, y jamás volverás a verla. 

Un reto al que jamás me había enfrentado, reconozco que es admirable tu temple de batalla. Me has desafiado, y no debo permitir que un mortal me derrote en mi propia tierra, ahora tendré que terminar con este duelo. Solo depende de mi espada, el futuro esta en mis manos. Sin embargo, estas de pie, te he menospreciado.  

Llego el momento, el ultimo golpe, aquel que define el destino de la Tierra. Has venido a mi mundo a desafiarme, creyendo que podrías vencerme y llevarte las esperanzas y la luz. Y de verdad crees que el milagro vendrá. Ahora mismo pondré fin a este absurdo duelo, yo soy el Kaiser y tu un mortal, nada de esto tiene sentido. 

Hace mucho despoje al mundo de su fe y luz, pues hoy no sera el día en el que vuelva a brillar porque no te lo permitiré. De pie, mi poder es absoluto, aquí va mi ultimo golpe. Ha colisionado con tu fuerza, pero no lograras venderme. 

De repente ha surgido un rayo de luz, y supe que en ese instante me derrotarías. Pues debí entender que la fe pertenece a la Tierra. Ahora has ganado nuevamente la luz y liberado las ilusiones y el amor de mis prisiones. Llévalas al mundo y que los habitantes no se confundan con otros ruines sentimientos.