Alabada

 Se acumula y florece esta sensación de valentía que se expande en el corazón, a medida que se escribe nuestro destino final. Unamos las manos para hacer un juramento, despegando hacia el cielo en un viaje al amanecer. Y no olvidar que estábamos aquí en la Tierra, no mirar atrás ni retroceder. Seguir firme sin vanas promesas del después. A quien vende los ideales por blancas promesas, un futuro incierto esperara. Tengo la fuerza del amor, voy a recuperar nuestro futuro, sin miedo a perder. En tus pies en este mismo instante, tu espada de Relámpago perforo el cuerpo maligno del infierno. Como un héroe de acero, que desea que su sueño de paz se convierta en realidad. 

Debes crees en el amor y proteger el futuro. En la eternidad todo se sucederá tal y como apareció en los sueños. Como si fuera a perder toda la energía tras sus espaldas, el tierno espejismo de la razón. Nunca volverá y caerá en el mar de las estrellas. No te asustes ni tires tu orgullo. Danza con valentía, y asciende al cielo con sus alas de oro. 

Conoces el significado de la rendición y vas bajo el mando de tu alma inmortal, gobernado por la tierna ambición de paz.